Outsiders

Si tuviera que fundar un país con toda la gente que ha sido insuficientemente valorada o querida en estos últimos años creo que tendría un gran país. Al igual que en las dinámicas observadas en Gran Hermano, el personaje más interesante sale el primer día, luego hay una lucha constante entre malos y tontos que terminan de ganar estos últimos y, salvo esto, que tiene un cierto halo de mérito inverso, el asunto pierde interés desde el minuto cero.
Pero que gran país tendría si pusiera a mi catedrático de referencia de sabio de la montaña, a Pestañitas de Ministra de Economía o a la petisa de secretaria de Estado de Comercio, por ejemplo.
El hecho es que si recompusiera un reino con todos estos principes destronados y princesas, tendría un mundo espectacularmente brillante y plagado de talento, de ojitos iluminados, de gentes transparantes, profundas, honestas, coherentes y muy sólidas.
Los fatuos que no miran a los ojos, los caguetas, los listillos, los eternos conformes y las niñas monas, se quedarían en este otro reino, dirigiendo empresas y dando clases en la peor universidad de europa.
Temblad tristes alineados, nosotros, los outsiders, cual ejército de "v" infliltrado estamos al borde del exilio y no tenemos pensada la fecha de regreso.

Comentarios

  1. No sé si soy un Outsider, pero me gustaría mucho ser uno más en tu nuevo país. Quizá no sea un País de las Maravillas, pero seguro que mejor que este si que es.
    No es necesario que me otorgues un cargo notable, con ser peón estaría más que satisfecho.

    ¡Amelia Presidenta!

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  2. Bienvenido al exilio!!!! eres un perfecto ciudadano de mi reino!!!

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